“El voluntariado es una fragua de competencias y habilidades inherentes en las personas”. Así de claro se muestra Santiago Sanjuan, responsable del voluntariado social en IMECO (Instituto de Mediación y Conciliación), quién tiene la total certeza de que realizar un voluntariado es una decisiones más importantes que puede tomar un individuo para crecer tanto en lo personal como en lo profesional.
“El voluntariado es la gran herramienta”, dice Santiago Sanjuan. Él es un hombre elocuente y sabio, que lleva muchos años tratando con personas, inspeccionando el interior de los individuos y sacando lo mejor de todos ellos. Su labor la desarrolla de forma natural, como quién tiene un don, y tiene muy claro el valor incalculable del voluntariado en la vida de cada una de las personas que realiza uno de ellos.
¿La gran herramienta para? Repreguntamos, curiosos ante la siguiente respuesta. “No hagas un máster, hazte un buen voluntariado”. Y con esto -creemos que- nos ha dicho ya todo. Pero no, aún hay más.
“Con las diferentes crisis sufridas en los últimos tiempos, las empresas han empezado a buscar otro tipo de trabajadores, que sean eficientes, flexibles, ágiles (mentalmente), que se sepan adaptar a las distintas situaciones cambiantes”, continúa hablando Santiago, quién no para de poner ejemplos y recordar historias para explicar la importancia del voluntariado y de las habilidades que se logran o descubren durante la realización de un programa.
“Todas estas habilidades se logran realizando un voluntariado. El voluntariado es una fragua de competencias, de habilidades inherentes a las personas”, insiste Santiago. “La gente tiene cosas muy buenas pero no lo saben. Y esto lo logras colaborando donde sea como persona voluntaria. La clave de la vida es descubrir tus propias competencias y entender cómo éstas te pueden ayudar a innovar y transformar. Una persona está fallando cuando le falta autoconocimiento. O te distingues, o te extingues”.
“Y ahora Reconoce certifica las competencias de las personas voluntarias. ¡Es lo más bonito del mundo!”, destaca Santiago en su discurso. “Nosotros preparamos las competencias de las personas voluntarias ya que estas son fundamentales a la hora de conseguir un trabajo. A día de hoy el currículum académico es solo una cosa más, ya que las experiencias sociales y personales, como los voluntariados, son ya tan importantes como los estudios realizados”. Y concluye de nuevo: no hagas un máster, hazte un buen voluntariado.